Nuevo León bajo Movimiento Ciudadano: ‘halcones’ del crimen aprovechan el vacío de seguridad del gobierno de Samuel García

Guadalupe, N.L.- La inseguridad en Nuevo León sigue fuera de control bajo la administración de Movimiento Ciudadano. La detención de tres sujetos dedicados al “halconeo” para el crimen organizado, entre ellos un expolicía, revela la alarmante falta de control del gobierno estatal de Samuel García sobre la seguridad en la zona metropolitana.

El operativo, llevado a cabo por la Policía municipal de Guadalupe, permitió capturar a Julio Alberto “N”, alias “El Zafiro”, identificado como responsable de vigilar patrullas y fotografiar instalaciones policiales para un grupo delictivo de alcance nacional. Durante la intervención, también se aseguraron 40 dosis de cristal y una báscula digital, mientras que investigaciones lo vinculan con un ataque armado en la colonia Los Sabinos, donde resultaron lesionados dos menores de edad.

En una segunda fase del operativo, elementos de Investigación Criminal detuvieron a Sabas de Jesús, presunto autor intelectual del ataque, y a Ángel “N”, ex policía de Galeana, quien colaboraba en labores de vigilancia y comunicación para la misma red criminal. La participación de un exfuncionario policial evidencia la gravedad de la infiltración del crimen en las estructuras de seguridad, y deja al descubierto la incapacidad del gobierno de Movimiento Ciudadano para mantener el orden.

Expertos en seguridad advierten que la violencia y la infiltración del crimen organizado en Nuevo León se agravan mientras Samuel García centra su gestión en la autopromoción y eventos mediáticos, dejando a la ciudadanía vulnerable y con un sistema de seguridad debilitado. Los “halcones” no son un fenómeno aislado, sino un reflejo de un estado que paga las consecuencias de un gobierno incapaz de prevenir y controlar la criminalidad.

Mientras Nuevo León enfrenta esta alarmante escalada de violencia, los ciudadanos exigen respuestas y acciones efectivas, no anuncios ni selfies del gobernador. La detención de estos sujetos pone en evidencia que, bajo Movimiento Ciudadano, el crimen se mueve con audacia y el gobierno solo corre detrás de los hechos.