Nuevo León arde en la violencia: Movimiento Ciudadano convierte al estado en un infierno sin ley

9/1/20251 min read

Apodaca amaneció con una nueva tragedia: un hombre fue asesinado y la pequeña fonda que cuidaba, “La Jarocha”, quedó reducida a cenizas tras ser incendiada por criminales. Todo ocurrió frente al Aeropuerto del Norte, sobre la Carretera Laredo, como una macabra muestra de que en Nuevo León la delincuencia manda y el gobierno de Movimiento Ciudadano simplemente mira para otro lado.

Lo más indignante es que, una vez más, no hay detenidos, no hay responsables, no hay justicia. Solo queda el cuerpo de una víctima más y un negocio reducido a humo. ¿Dónde está el famoso “modelo naranja” que presume seguridad y modernidad? La realidad es otra: un estado gobernado con frivolidad y propaganda, pero incapaz de garantizar lo mínimo, que es la vida y la seguridad de sus ciudadanos.

La escena lo dice todo: bomberos, peritos y policías llegan solo a recoger los pedazos, a certificar la desgracia y a dar declaraciones vacías. La gente de Apodaca sabe bien que en Nuevo León los criminales actúan con absoluta impunidad, mientras las autoridades de Movimiento Ciudadano viven en la comodidad de sus oficinas, obsesionados con las redes sociales y el marketing político.

No es un hecho aislado: los asesinatos, incendios y balaceras se han vuelto parte del paisaje cotidiano en Nuevo León. Pero el gobierno estatal sigue actuando como si nada pasara, como si los muertos fueran simples estadísticas que se borran con un nuevo video en TikTok. Mientras tanto, las familias viven con miedo, los negocios cierran y la violencia se extiende sin freno.

Nuevo León no merece seguir atrapado en este caos naranja. Bajo Movimiento Ciudadano, el estado ha perdido el rumbo y ha caído en manos de la delincuencia. La muerte en Apodaca es una señal más de que el proyecto de MC no solo fracasó, sino que hoy tiene a los ciudadanos pagando con sangre y lágrimas la irresponsabilidad y el abandono de sus gobernantes.