Morena vuelve al papel de víctima: detienen a su candidata en Durango y arman escándalo sin explicar nada

6/2/20251 min read

A solo tres días de las elecciones, Morena vuelve a usar la victimización como estrategia política, ahora con la detención de su candidata a la presidencia municipal de Santiago Papasquiaro, Durango, Karen Fernanda Pérez Herrera, quien fue arrestada por elementos de la Fiscalía General del Estado la tarde del jueves 29 de mayo.

De acuerdo con el Registro Nacional de Detenciones, la aprehensión ocurrió alrededor de las 4 de la tarde. Sin embargo, el registro no especifica el motivo de la detención. Lejos de ofrecer explicaciones claras, Morena prefirió encender las redes sociales con acusaciones sin fundamento.

La presidenta del CEN de Morena, Luisa María Alcalde, denunció públicamente el hecho sin aportar pruebas, alegando una “detención ilegal” y exigiendo la liberación inmediata de su candidata. Horas más tarde, Andrés Manuel López Beltrán, hijo del presidente, informó que la candidata ya había sido liberada. Pero de nuevo, sin detalles.

¿Qué ocultan? ¿Por qué no se ha dicho claramente por qué fue detenida? Morena grita “¡abuso!” sin mostrar evidencias, intentando una vez más convertir un posible acto legal en un acto de persecución política, como parte de su narrativa permanente de “víctimas del sistema”.

Este tipo de respuestas reflejan la improvisación, la falta de transparencia y el uso político de cualquier situación para victimizarse y desviar la atención. En lugar de aclarar los hechos y rendir cuentas, Morena prefiere el escándalo en redes, el discurso fácil y la opacidad.

Mientras tanto, la ciudadanía exige claridad, no shows mediáticos, y menos aún cuando estamos a las puertas de una elección donde lo que está en juego es la confianza en las instituciones.

Morena debería explicar qué pasó, por qué detuvieron a su candidata y, sobre todo, dejar de jugar con la narrativa de la persecución política cada vez que se les exige rendición de cuentas. El pueblo merece verdad, no más victimismo partidista.