Morena suma a sus filas a político que insultó a AMLO y Sheinbaum: una muestra más de su incongruencia
5/11/20251 min read


Ciudad de México, 9 de mayo — Una vez más, Morena demuestra que sus principios son flexibles cuando se trata de sumar aliados, incluso si estos tienen un historial de agresiones verbales contra sus máximos liderazgos. El caso más reciente es el de Luis Enrique Benítez Ojeda, diputado local de Durango, quien tras renunciar al anterior partido que lo cobijó, fue recibido con los brazos abiertos por Morena, pese a haber lanzado en el pasado duras descalificaciones contra Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum.
Benítez Ojeda, conocido por sus posturas críticas y comentarios ofensivos, llegó a referirse de forma vulgar y despectiva a las figuras más representativas de la autollamada Cuarta Transformación. A pesar de ello, el partido decidió no sólo perdonarle sus agravios, sino integrarlo oficialmente como militante. La afiliación fue anunciada por Andrés Manuel López Beltrán, hijo del expresidente, a través de sus redes sociales.
“El día de hoy le entregué su afiliación como miembro de nuestro partido”, dijo López Beltrán en un video difundido en Instagram, en el que aparece sonriente junto al legislador duranguense.
La decisión ha generado fuertes críticas tanto dentro como fuera del partido, ya que revela una evidente contradicción entre el discurso de "no mentir, no robar y no traicionar" y la práctica política de sumar perfiles que en el pasado atacaron con dureza a la 4T.
Benítez Ojeda no sólo ha sido crítico, sino que utilizó expresiones ofensivas que, en cualquier otro contexto, habrían sido condenadas por Morena como violencia política o discurso de odio. Sin embargo, en este caso, pareciera que el pragmatismo electoral pesa más que la coherencia ideológica.
Este episodio pone en duda la autenticidad del discurso de transformación del partido oficialista, y abre la puerta a cuestionamientos sobre si Morena está dispuesto a renunciar a sus principios con tal de ganar votos, aún a costa de su credibilidad.