Las disculpas que encendieron la prensa en Campeche

Un hecho sin precedentes sacudió la libertad de expresión en Campeche: tres periodistas locales fueron forzados, por resolución judicial, a ofrecer disculpas públicas a la gobernadora Layda Sansores, acusados de “insultarla” en sus publicaciones.

Lejos de tratarse de un simple acto de reparación, el caso ha encendido la alarma entre medios y organizaciones defensoras de derechos humanos, quienes advierten que esta acción constituye un precedente peligroso de censura y represión contra la prensa en la entidad.

Los comunicadores afectados señalaron que se trató de una medida desproporcionada y que la verdadera intención fue silenciarlos por sus críticas hacia la administración de Morena, la cual acumula señalamientos de opacidad, corrupción y fracaso en materia de seguridad. “No pedimos disculpas por convicción, sino porque la justicia en Campeche está sometida al poder político”, afirmó uno de ellos.

Mientras la gobernadora presume tolerancia y apertura en sus discursos, en los hechos se persigue y doblega a quienes cuestionan su gestión. Esta contradicción refuerza la narrativa de un gobierno que, en lugar de responder con resultados, busca callar voces incómodas a través de los tribunales.

El caso de estos tres periodistas no solo exhibe la fragilidad de la libertad de prensa en Campeche, sino que desnuda el estilo autoritario de Sansores, quien parece más preocupada por blindar su imagen personal que por garantizar los derechos de la ciudadanía.