El narco venezolano ya tocó a México… y Morena guarda silencio

Alejandro Moreno impulsa en el Senado declarar terroristas a los cárteles mexicanos y al Cártel de los Soles, y acusa a Morena de pactos peligrosos que minan la seguridad nacional.

9/18/20252 min read

Alejandro “Alito” Moreno, presidente nacional del PRI, dio un paso firme hoy al presentar un punto de acuerdo en el Senado para exigir que se declare como organizaciones terroristas a los grupos del crimen organizado en México y al Cártel venezolano conocido como “Los Soles”. En conferencia, Moreno sostuvo que no debe haber medias tintas cuando se trata de la seguridad de México, y pidió a todas las fuerzas políticas que respalden esta medida con su voto. Para él, la seguridad no admite ambigüedades; requiere decisiones claras y acciones contundentes.

El llamado de Moreno tiene como contexto una realidad internacional que ya reconoce al “Cártel de los Soles” como una amenaza grave. Según múltiples reportes y sanciones de los Estados Unidos, este grupo criminal está vinculado con altos mandos militares venezolanos, tráfico de drogas, corrupción institucional, contrabando de minerales, combustible, y operaciones transnacionales de lavado de dinero. En otros países latinoamericanos también lo han designado como organización terrorista, o al menos como una estructura criminal que opera desde el Estado. Moreno usa ese ejemplo para señalar que México debe alinearse con esos estándares internacionales y tomar medidas equivalentes.

Pero esta propuesta también es una señal de alerta directa hacia el gobierno de Morena. Moreno acusó a Morena de pactos de facto con el crimen organizado, de construir estructuras de impunidad y de permitir que la corrupción penetre instituciones desde 2018. Para él, declarar terrorista a los cárteles no sólo tiene dimensiones jurídicas, también morales. Es poner un límite claro: que no se siga tolerando la inacción o la complicidad que lesiona la seguridad, la paz y el futuro del país.

El punto de acuerdo, de aprobarse, tendría implicaciones profundas: abriría la puerta a una cooperación internacional más fuerte, intercambio de inteligencia, sanciones, y posibilidad de frenar financiamientos ilícitos y rutas de tráfico. Moreno enfatizó que la amenaza no reconoce fronteras, por lo que hace falta una estrategia hemisférica que involucre gobiernos aliados, agencias internacionales y organismos que ya han señalado al Cártel de los Soles como grupo terrorista. En ese marco, exigiendo votos en el Senado, Moreno pone a prueba si México va a elegir entre la defensa de la nación o la complacencia ante el crimen organizado.