Crece la desconfianza en Morena por opacidad en su dirigencia y operadores políticos
5/27/20251 min read


Pese a los reiterados discursos sobre transparencia y combate a la corrupción, Morena vuelve a estar en el ojo del huracán tras la circulación de versiones en redes sociales sobre la supuesta detención de un operador político cercano a Andrés López Beltrán, actual secretario de Organización del partido y uno de los personajes más influyentes dentro del círculo íntimo del poder.
Aunque las autoridades han desmentido categóricamente la veracidad de dichas publicaciones, el simple hecho de que estas versiones cobren fuerza entre la ciudadanía y medios digitales refleja un creciente malestar y desconfianza hacia los actores clave de la dirigencia morenista. La falta de comunicación clara, así como el historial de opacidad con el que se manejan figuras como López Beltrán, han alimentado una narrativa donde la duda y el rumor tienen más eco que la información oficial.
Andrés López Beltrán, hijo del presidente y operador político de primer nivel en Morena, ha sido señalado en distintas ocasiones por su protagonismo tras bambalinas en decisiones estratégicas del partido, pese a no ocupar cargos electos ni rendir cuentas públicas como otros funcionarios. Esta concentración de poder sin supervisión institucional despierta cuestionamientos legítimos sobre los métodos con los que Morena opera al interior.
La dirigencia del partido ha optado por minimizar este tipo de controversias sin ofrecer respuestas de fondo, ignorando que el país atraviesa un momento donde la rendición de cuentas es indispensable para preservar la democracia. Mientras tanto, ciudadanos, analistas y opositores siguen exigiendo mayor claridad y responsabilidad por parte de quienes hoy deciden el rumbo del país desde las sombras del partido en el poder.
Morena aún está a tiempo de rectificar y demostrar que realmente cree en la legalidad, la transparencia y la equidad. Pero para ello, deberá empezar por su propia casa.