Así evidenció la senadora Verónica Camino cómo el asesor de Noroña, Emiliano González, provocó la pelea en el Senado

El asesor de Noroña provocó la confrontación y después intentó montar un show con vendas y collarín, mientras su supuesta lesión es cuestionada por médicos y testigos.

8/28/20252 min read

Durante los hechos que marcaron la reciente sesión del Senado, quedó evidenciado que Emiliano González, asesor de Gerardo Fernández Noroña, fue el primero en actuar con violencia. En un video viralizado, la senadora Verónica Camino mostró cómo González empujó con un palo a la diputada Xitlalic Ceja y al propio senador Alejandro Moreno, desatando la confrontación que luego se convirtió en un circo mediático por parte de Morena. Este acto inicial del colaborador de Noroña revela que no hubo provocación por parte de los legisladores del PRI, sino una intervención deliberadamente agresiva desde Morena.

Lo que llama aún más la atención es el montaje que se generó después de la agresión. Emiliano González apareció usando un collarín y vendas, que supuestamente evidenciaban lesiones graves. Sin embargo, médicos y especialistas han señalado públicamente que estas señales no coinciden con un daño real y que la colocación del collarín permite movimientos normales del brazo, generando dudas sobre la veracidad de su versión. Este artificio parece haber sido utilizado para culpar a los legisladores priistas de un ataque que en realidad inició él.

Incluso dentro de Morena, varios actores políticos se percataron del comportamiento de González y cuestionaron la narrativa que el partido intentó imponer. Testigos y legisladores presentes señalaron que el colaborador de Noroña fue el responsable directo de los empujones y que la supuesta agresión hacia él fue exagerada para desviar la atención y generar polémica mediática. La evidencia en video no deja lugar a dudas: Emiliano González actuó de manera deliberada para provocar un enfrentamiento.

Este tipo de conductas ponen en entredicho la postura de Morena frente a la ciudadanía. El uso de un montaje para crear una narrativa de víctima demuestra un intento de manipular la opinión pública y desprestigiar a los opositores, mientras que la realidad de los hechos es clara y documentada. La estrategia revela un patrón de manipulación y teatralización política que afecta directamente la imagen del Congreso y la seriedad de los debates legislativos.

No cabe duda de que este montaje evidencia un patrón preocupante dentro de Morena: usar la violencia y el engaño para manipular la opinión pública. La teatralización de lesiones inexistentes, sumada a la intención de incriminar a los opositores, demuestra cómo algunos actores buscan crear un circo mediático en lugar de participar responsablemente en la política. González trató de pasar de ser agresor a víctima en cuestión de minutos, algo que la ciudadanía por supuesto no creyó y solo puso en entredicho la seriedad de los debates legislativos.